Si es que lo que no puede ser, no puede ser y además es imposible.
No sé si me expreso bien. Quiero decir que hay cosas que no ... ¿cómo lo diría yo?, que son difíciles de conciliar, vamos. Eso es: conciliar. O sea que, eso, que estamos o no estamos.
Porque, a ver, cómo va la gente a conciliar lo que es inconciliable. Esta última palabra es compuesta. O sea, que se compone de dos palabras: "in" y "conciliable". Aquí, en este caso, se antepone la partícula "in" para negar el subsiguiente término, o sea, "conciliable". Menos mal, ya voy aclarando un poco lo que quiero decir.
Por cierto, hablando del Concilio: que el próximo martes tenemos charleta como todos los terceros martes de cada mes. A ver si no os olvidáis, perrunos! Allí sí que conciliamos lo conciliable y lo inconciliable, ¿a que sí?. Eduardo ya nos tiene avisados. No faltemos, carajo!
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