Entrar en este asunto es entrar casi en el infinito. Cada cual, salvados los análisis críticos y académicos, y ante diferentes pìezas (pintura, escultura, cine,teatro, arquitectura; dejo fuera la literartura escrita), reacciona -siente y admira o minusvalora- por lo que la visión y audición, las ideas que sugiere, las formas,lo que echa en falta, el estar previo -con el que entramos en un museo, teatro o cine-,todo ello guisado y estructurado por el cerebro conforme a nuestras vivencias archivadas, llegamos a sentirnos a gusto, reaccionando glandularmente con placer -estético, le llaman-, con placer o recomnocmiento limitado o condicionado, e incluso, con el convencimientpo de que lo visto y oído no "me" merece la pena su existencia.
Entrar en este asunto es entrar casi en el infinito. Cada cual, salvados los análisis críticos y académicos, y ante diferentes pìezas (pintura, escultura, cine,teatro, arquitectura; dejo fuera la literartura escrita), reacciona -siente y admira o minusvalora- por lo que la visión y audición, las ideas que sugiere, las formas,lo que echa en falta, el estar previo -con el que entramos en un museo, teatro o cine-,todo ello guisado y estructurado por el cerebro
ResponderEliminarconforme a nuestras vivencias archivadas, llegamos a sentirnos a gusto, reaccionando glandularmente con placer -estético, le llaman-, con placer o recomnocmiento limitado o condicionado, e incluso, con el convencimientpo de que lo visto y oído no "me" merece la pena su existencia.