Tener monos en la cara

NOTA QUE en la expresión ¿es que tengo monos en la cara o qué?, ‘monos’ no tendría que ver con primates. En su origen, el término utilizado era μῶμος  (tener momos en la cara): tener/poner gesto, figura o mofa que se ejecuta para divertir en juegos y danzas. Con el uso se fue transformando en el más familiar ‘monos’. Proviene de la mitología griega y se refiere a Momo, dios del sarcasmo, la burla y las bromas. De ahí que al que tenía o ponía cara chistosa se le decía que tenía momos en la cara.