Me parece que, independientemente de todo lo que les queda por delante -que sin duda será mucho-, la inmensa mayoría de los egipcios tiene derecho a celebrar su primer gran paso hacia la libertad. Hacia la democracia. Sin el dictador, por fin.
Estas egipcias lloran, pero esta vez de alegría. Estemos junto a ellos. Sin airear hipotéticos malos augurios. No tenemos derecho alguno a ser "gafes" (tú ya me entiendes, ¿verdad?).
En este cibercafé, en Alejandría, se encendió la mecha de la gran protesta. Esa ciudad que todos llevamos en nuestro subconsciente como la de la "quema" de su famosa Biblioteca en la antigüedad.
De aquí se llevaron dos policías a Jaled Said para empezar a apalearlo por comentar en su blog l
a realidad egipcia. A estos se les unieron otros para rematarlo.Luego le pusieron un bola de droga en la boca y lo arrojaron muerto delante de su casa.
Casi 400.000 jóvenes se sumaron a la campaña Todos somos Jaled, organizada a través de Facebook.
El resto, es ya de todos conocidos.
(Capté esta imagen de la TV Al Jazeera, en directo, desde mi ordenador).
Túnez, y sobre todo Egipto que ya lo tiene en la mano, ¿no son los dos países del norte de África, Amador, con desarrollo, no solo crecimiento económico, luego incluye acceso a la formación y a la cultura, mayor?
ResponderEliminarNota: vaya construcción que me ha salido; para que pongan la frase en selectividad.
Otra frase para 'selectividad':
ResponderEliminar¿Cómo es posible que un 'líder' como Mu‘ammar al-Qaḏḏāfī diga antes de ayer mismo que “no es cierto que Mubārak sea rico, no tiene ni para trajes: le hemos tenido que ayudar económicamente varias veces”; y que nuestro presidente del congreso suelte en Guinea Ecuatorial que “hay muchísimas más cosas que nos unen que las que nos separan” sin que se les caiga la cara de vergüenza, o es que estamos en el mundo al revés?