Quienes tenemos ya algunos años, conocemos bien la música y la letra de esta canción. Quizá, Don Felipe González esta mañana, ha querido dar la primera nota en la SER para que se vuelva a cantar la misma melodía. Con una voz nueva, pero cuidadosamente elegida.
Los ciudadanos nos vemos obligados a presenciar un espectáculo de cuchillos y navajas, donde nos gustaría ver un debate de ideas, argumentos y razones. Una verdadera pena.
Malos, pésimos tiempos para la lírica. ¿Qué pasará ahora? ... terceras elecciones con mucha probabilidad. Estamos sin política porque estamos sin políticos, se han quebrado por leer antes los renglones de sus intereses —escritos con infinita torpeza— que el libro de las necesidades ciudadanas. No hay democracia sin partidos (al menos hoy no conocemos otro fórmula) pero con estos partidos la democracia misma está en un riesgo muy grave.
ResponderEliminarPésimos tiempos para la lírica. También para la épica. Seguimos, cada vez con mayor maestría, en la picaresca...
EliminarLos que aquí escribimos fuimos en los años sesenta avanzadilla de un mundo nuevo. Desde entonces para acá venimos asistiendo a su difícil nacimiento. Hoy nos toca ser testigos de cómo se ha roto uno de los dos pilares políticos de nuestro país. Escuchaba hace unos minutos al crítico Ant.Pradas (PSOE, Sevilla) decir con el corazón en la mano que Ferraz era la casa del pueblo. Si a mí, que soy bastante mayor que él, me sonó a dialecto marciano, no me atrevo a pensar en la perplejidad de los menores de cuarenta.
EliminarAtreverse a dar un salto en el vacío, hacia el futuro y sin GPS, solo es para unos pocos. O de otra forma: no hay parto sin dolor.