martes, 21 de junio de 2011

Universidad Loyola, CHICAGO, 2009



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3 comentarios:

  1. Mi hermano Francisco comenta lo siguiente:

    "Veo que sigues entregado al movimiento de indignados. Me parece bien. Yo también tengo mi cabreo, no creas. Pero mi natural recelo hacia las asociaciones o movimientos, sean culturales, deportivos ... o políticos, que me ha librado de pertenecer a algún partido, hace que me incline a no considerarme integrado en 15 M, pues mucho me temo que no tardando me encontraría fuera sin haberme salido. Me explico: por desintegración de tal movimiento. ¿Recuerdas la película Viva Zapata y cómo se hace revolucionario? Así queda constituido el 15 M. Y ¿recuerdas cuando, ya generalito, cae en el mismo pecado con otro protestón como él -¿¿Cómo te llaaaaamas?!- y tiene que irse de nuevo al monte? Quiero decirte que los indignados, quieranlo o no, acabarán como organización, con superiores y subalternos, sueldos y sueldotes, burocracia, coches oficiales ... en fin, otro partido más o menos radical, con los mismos pecados y lacras que cualquiera de los actuales. Hasta que surja de entre ellos -¿o de vosotros?- un nuevo Zapata que pregunte cómo te llamas y diga ¡vámonos a la Puerta del Sol!, repitiéndose así el fatídico ciclo de la humana condición, condenada a vivir en sociedad y a indignarse cada cierto tiempo y marchar más o menos bravamente al monte.
    Me pregunto ¿por qué aún no ha salido alguna insignia identificativa para llevar en la solapa y así proclamar en cualquier lugar y ante cualquiera que uno es un cabreado de esos? ¿Será porque es más fácil y espontáneo indignarse desde el anonimato de la multitud? Os propongo un triángulo equilátero verde, puesto con un vértice hacia abajo."

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  3. Apoyo a nuestra flamante nueva Dama de Honor y pienso que la movilización espontánea y popular que se ha desatado en distintas partes del mundo tenía y tiene por objeto hacer visible un malestar compartido y unánime para que la clase política lo deba traducir en cambios factibles. Así parece que lo ha entendido el candidato del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba.

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