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"Españolito que vienes
al mundo te guarde Dios, una de las dos Españas ha de helarte el corazón" El copista se pregunta, sin estar seguro de la respuesta: Exageraba Don Antonio? Eran otros tiempos que nada tienen que ver con la España de hoy? A qué España se refería el poeta? Se agradecen todas las aportaciones que ayuden a comprender |
sábado, 16 de diciembre de 2017
Españolito...
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Que yo sepa y recuerde, Machado se refería a las dos Españas de antes de la GC: Una era la retrógrada y la otra la progresista. Ese verso, como ya sabemos, se ha utilizado con muchos sentidos, y se seguirá usando. El poeta no hacía profecías; pero sí es verdad que después del uso de este verso por el franquismo, ha llevado a la creencia de la existencia permanente de dos Españas como una realidad insuperable. El artículo de Madina en El Pais de hoy tiene algún párrafo que lo puede aclarar algo; entre otras cosas, este artículo me ha parecido estupendo.
ResponderEliminarEstos versos se publicaron en 1912.
ResponderEliminarEl artículo de Madina me parece especialmente interesante en este tiempo de reduccionismo. De alguna forma, complementario de la visión de F. Vallespín:
Eliminar"Si Cataluña acaba exportándonos al resto la cuestión del ¿quiénes somos?, la derecha tiene mucho más que ganar que la izquierda. Sobre todo porque un importante sector de la misma, el representado por Podemos, cayó en la trampa del discurso de Esquerra Republicana de Catalunya de asociar identidad con democracia, ethnos con demos, un error conceptual del que va a costarles salir"
Es posible que se encuentre el lenguaje preciso de los "ciudadanos y el interés general" pero no parece que sea para mañana...
Dos Españas, dos Francias, dos Bélgicas, dos Italias, dos EEUU, etc. El yin y el yan. Arriba, abajo; izquierda, derecha. Divisiones caben muchas y parecen gustarnos. Como si faltando estas fuéramos menos individuos. Por eso los nacionalismos mentales exluyen a los que no piensan como nosotros que, así, resultamos más nosotros. En el espacio exterior profundo no existen divisiones. Interesante, porque ahí es donde vivimos precisamente tú y yo, quien esto lee y el que esto escribe. Existen los infiernos: los que nos inventamos para sobresalir de entre los comunes. Quizá lleguemos un día a superar estos pesados complejos de inferioridad, esta falta de autoestima que necesita esta clase de bastón.
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