lunes, 26 de marzo de 2018

El Copista



"Palabras rotas, sin sentido
entre gritos y amenazas.
Imposible hablar,
los puentes destruidos.
Solo queda el silencio
y en la amarga espera
recuperar, de nuevo,
la voz y la palabra"
                                                         

3 comentarios:

  1. El que espera, desespera, según el dicho popular. Y en ámbitos estadísticos se manejan probabilidades. Quizá, pues, la cuestión se sitúe en lo que es razonable y más probable que ocurra en las situaciones o hechos que deseamos ocurran. Visto así aún es más difícil quizá luchar por aquello que uno cree que merece la pena invertir energías y tiempo. Por no entrar en el campo de la actitud optimista o pesimista ante la vida en general, o de la esperanza como motor de la vida humana. Se impone recuperar la voz y la palabra. Eso desde ya mismo. Gracias.

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  2. Muchas veces me he visto esperando, siempre esperando, pero nunca he sentido que esta espera fuera amarga. Esperando a mañana, esperando a alguien, esperando una noticia, esperando..., pero nunca sentí amargura. Me he sentido tocado por la espera amarga, porque esperamos a la palabra y la voz.

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    Respuestas
    1. La RA define amarga como "que causa aflicción o disgusto, que implica o demuestra amargura o aflicción"
      En este caso, la espera en silencio, con la imposibilidad de hablar porque los puentes están destruidos y las palabras rotas, significa la derrota de la comunicación para el copista.
      La recuperación de la voz y la palabra es una esperanza, no una seguridad.
      Amarga derrota, amarga espera impuesta y no deseada.
      Algo así puede ser el sentimiento del copista, aunque tampoco puedo afirmarlo.

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