Pacomia: 17.07.2012

Si hicimos bien los cálculos, nos sentamos en la mesa cinco y vivimos la pacomia número 46, habiendo sido la primera en junio de 2008. No recuerdo muy bien el devenir de temas, asuntos y chistes sobre el que pasamos un buen rato. Creo recordar que ninguno de los cinco (José Luis, Manolo, Amador, Remigio y yo) teníamos muchas ganas de caer en el hoyo en el que, por otra parte, dicen todos los que hablan a los demás a través de micros, estamos incluidos. Mucho más los que tiene derecho a cobrar el "seguro" (no prestación) de desempleo, funcionarios, y, ya puestos, todos, menos los que parece ser que viven en el quinto cielo, que son pocos según algún ministro, ese que ignora qué se entiende por "grandes fortunas".

Con todo, sí que fuimos capaces de pasar casi de puntillas por los flashes más gruesos de la realidad, incluida la diputada hija que insultó a todos los bien nacidos, aunque ella solo pretendía insultar a unos pocos, a los que le acababan de quitar unos cuantos billetes de euro para incitarles a buscar trabajo, aunque  todos sabemos que no existe ese puesto de trabajo para ellos; parece que la diputada lo ignora, y por eso insulta, ofende, degrada, humilla. Debe ser porque es de los que viven en quinto cielo. Todo lo demás, lo conocemos todos, y todos hemos rebuscado dónde están las soluciones que no nos dicen; será que nos las conocen; será que lo están haciendo conscientemente; será que obedecen, como han hecho siempre esos que parece que son los que mandan; será que los capitalistas, los que están más allá del quinto cielo, necesitan más, y para más inri, quieren que todos, a ser posible todos, menos sus enchufados, cada día tengan, y quizás sean (de "ser"; no cantidad), menos.

Siguiendo el consejo de uno de los asistentes, breve. Solo dos párrafos. Buen verano; hasta septiembre.