miércoles, 26 de diciembre de 2012

Tengo un familiar que es ‘vidente’

Si nunca os lo había dicho, ahora ya lo sabéis. Es un poco, cómo diría yo … especial. Sí, porque le encanta vaticinar el futuro. Luego, ocurra lo que predijo o su contrario, siempre comenta eso tan típico de ‘ya os lo dije yo’. Sea como sea, él disfruta con la polémica hasta el punto de que si dices ‘blanco’, él dice negro; y ello aunque piense blanco igual que tú. Qué más da: el caso es discutir. Es un familiar muy directo, tanto por la línea de parentesco como por la rotundidad de sus vehementes afirmaciones.
 
El caso es que hace apenas unos días (sin que yo me hubiera metido con él, que para nada, de verdad os lo digo) viene y me dice: el Partido Popular se disuelve, el PSOE arrasa en las próximas.
 
Eso mismo que estás pensando ahora fue lo primero que pensé yo también entonces. Ya te avisé que era un poquito especial.
 
Pero me gusta oírle -no lo niego-, y más en medio de este secarral de opiniones que atravesamos. Mi primera reacción –por seguirle el juego, pues ya sabéis que jugar forma parte de la esencia de nuestras esencias- fue preguntarle por sus fuentes, que de dónde él … Y va y me responde que nada especial: que oye Intereconomía, la SER, El País; nada especial, contesta.
 
Aquello prometía, estaba inspirado! La conversación fue breve. Disponíamos de escaso tiempo, pero sí el suficiente como para hacerme a mí y a su hija este breve resumen como de pasada y que intento resumir:
 
Es que vosotros no os fijáis. Esta crisis es tan diferente a las demás, la gente están tan harta ya que no va a tolerar más. A la ciudadanía se la engaña una vez, dos, tres; pero llega un punto que dice basta. El PP se derrumba -¿cómo la UCD, cómo el CDS?, interrumpo yo-, sí, exacto, continúa. Y el PSOE saca un programa más a la izquierda que Izquierda Unida. Fíjate lo que te digo: a la izquierda de IU –continúa con firmeza- si el PSOE se renueva y deja paso a gente joven. Esa es la condición, claro, sin ella … nada”.
 
Pues entonces lo llevas tú claro, acerté a reaccionar yo, desconcertado como me había dejado y perplejo ante la rotundidad de su visión de futuro. No había tiempo para más, pero ya lo buscaremos no tardando mucho y os contaré si os apetece.
 
Empecé diciendo que tengo un familiar cercano que se dice vidente. El que avisa no es traidor.

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