En su
atento Comentario a la Entrada > Conversómetro < Eduardo planteaba con interés 3
cuestiones:
1.-
¿Qué personaje estaba entre los micrófonos (en la imagen original entendemos)? RESPUESTA, Pedro Sánchez.
2.- ¿Quiénes son el tío y la tía que
estaban detrás con cara tan seria? RESPUESTA: la Dra. Ka y Panta, profesora
emérita de Sistemas Emocionales Hipotalámicos y el Dr. Matayotes,
astrofísico experimental de Cordelerías y Universos Paralelos. Profesores ambos de
esas respectivas cátedras en la Escuela Superior de Arlequines de la UE en
Antwerpen, Bélgica.
3.- El conversómetro, ¿son los micros, que
representan a los paisanos? RESPUESTA: correcto, así es. Se trata de un sistema
experimental basado en el principio de la relatividad de Einstein desarrollado a petición de numerosos y diversos grupos de indignados de la
Unión Europea, 'mareados' ante las peligrosas pendientes por las que ven
resbalar un día sí y otro también a tantos y tantos políticos electos.
El CONVERSÓMETRO mide el factor de conversión C² y consta de un ingenioso antenoide
robotizado que sostiene el Dr. Matayotes y que emite corpúsculos químicos
ionizados que atraviesan el magma corpóreo del entrevistado sin romperlo ni
mancharlo. La doctora los recoge en su paquetín celular, de forma similar a una registradora convencional, y que porta en su diestra mano.
Dichos corpúsculos así recolectados llegan 'embarazados' con los miasmas (o perlitas, eso depende) personales de la persona o grupo testados, siendo procesados en 2.07 milisegundos. Un
esquema básico y resumido del modelo se expone a continuación:
Ytumás-meter: medidor de egos
en lomíos (1.000 lomíos=1 kiloquehaydelomío).
CiberKatholicón: circuito
calibrador del pensamiento único y/o dogmático. Su unidad de medida es la meapila (1.000 meapilas hacen 1 episcopus).
Dijediegómetro, mide la capacidad
de las fantasías políticas. Unidad: el megamorro
(1.000 megamorros =1 ministerio).
Rastómetro, microprocesador
ultraselectivo para rastreo y medición de efluvios de la pelambre humana (ojo,
no la púbica, que a esa finalidad se dedica con evidentes/óptimos
resultados la rama de la afeitimetría). Carece de unidades de medida pues funciona
en binario: huele/no
huele. En la actualidad se trabaja en una versión complementaria y
urgente de este chip, el piojímeter (orientado de forma especial a toda
suerte de parlamentos, consejos bancarios, piquetes, eventos asamblearios,
manifas, consejos de ministros, acampadas, gamonales, etc.).
El Ipanodermo
mensura el TitulitusTeronium
—conocido como TTSNM por sus siglas
en inglés—, sustancia ovariscrótica que emana la propia carnalidad humana cuando grita
en público entre 4 y 7 palabras (más ya darían lugar a un discursillo razonado;
y va a ser que no). Y que, en el caso de seres vivos —y qué vivos— dedicados al
politiqueo, generarán un CiberTitular inmediato —de ahí su nombre— en medios y/o redes. El TTSNM se mide en unidades
llamadas falsehoods.
Nota que 1.000 falsehoods ~ 1 veritas asumida (y/o coreada).
¡Acojonante!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarJODER, me ha llevado siete -7- minutos entenderlo todo. La próxima vez, queridos creadores, ponedlo un poco más complicado para que me ejerza contra el alzeimer. Gracias
ResponderEliminarGracias colaboradores valiosos. Tendremos en cuenta estos sensaciones para una posible próxima vez, L Maier
ResponderEliminarDank geschätzt Kollaborateure. Wir werden diese Gefühle für einen möglichen nächsten Mal überlegen, Luke
El nivel de jubjub asciende a las altas esferas de la metaciencia. La magnífica colaboración artístico-técnocientífica que manifiesta esta entrada del blog lo pone de manifiesto.
ResponderEliminarEl comentarista solicita autorización legal, so pena de pecado punible a manos de la SGAE, para poder publiciarlo urbi et orbi, a modo de manifiesto situacional español.