¿No era, o es, San Blas el santo que curaba, o cura, los males de la garganta? Nos hace falta un santo que cure los males de las elecciones mal hechas.
No entiendo mucho de santoral, pero de acuerdo. Y ojo, sin olvidarnos de SR, por favor, cuyos beneficios palpamos a diario, bien que en cuestión de elecciones anda flojo no, lo siguiente!
Cuidado, no nos abandonemos antes de tiempo al pesimismo. Tenemos que confiar en que SR nos libere de la peste. Y, aunque ya huele muy mal, la peste no ha hecho más que comenzar. Levantemos el corazón hacia SR y libemos copas en su honor en buena compañía de hermanos. La semana que viene voy a andar un poco por Madrid; espero libar alguna con algunos.
¿No era, o es, San Blas el santo que curaba, o cura, los males de la garganta? Nos hace falta un santo que cure los males de las elecciones mal hechas.
ResponderEliminarNo entiendo mucho de santoral, pero de acuerdo. Y ojo, sin olvidarnos de SR, por favor, cuyos beneficios palpamos a diario, bien que en cuestión de elecciones anda flojo no, lo siguiente!
Eliminar¡Ay! Nos ha abandonado SR
ResponderEliminarCuidado, no nos abandonemos antes de tiempo al pesimismo. Tenemos que confiar en que SR nos libere de la peste. Y, aunque ya huele muy mal, la peste no ha hecho más que comenzar. Levantemos el corazón hacia SR y libemos copas en su honor en buena compañía de hermanos. La semana que viene voy a andar un poco por Madrid; espero libar alguna con algunos.
ResponderEliminar¡¿Libar alguna ... dice usted?! ... ad libitum!
EliminarDe acuerdo Mariano. El martes 7 no estoy en Madrid, y... Convoca y te digo, es más rápido.
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