Los resultados del referéndum de Escocia son una excelente noticia para no retroceder en la construcción europea. Unidos podemos ser más solidarios y tener más fuerza para afrontar las dificultades. Europa más unida jamás será vencida por la ignominia.
Desde el comienzo de la construcción europea, nunca hemos estado tan mal. A cada uno nos toca hacer todo lo posible para que lo construido no se derrumbe... El resultado del voto escocés es un motivo de alegría... de esperanza en el poder de los ciudadanos..y en la fuerza de la solidaridad. Esa es la Europa que necesitamos. La del S.XXI. No la de los nacionalismos del S.XIX, la de las fronteras cerradas y las miradas de rechazo al extranjero porque es diferente. Esa Europa ya la conocemos demasiado bien, hemos sufrido sus consecuencias y no queremos que sea el futuro de nuestros hijos.
Qué pena de editorial el 'fervorín' de El País sobre este referéndum: cada día que pasa se aleja más y más de su línea ‘progresista’ que inició en el 75. Quiero pensar que no por intereses económicos. Quiero pero me fallan las fuerzas.
No es con llamamientos voluntaristas, retóricos de esa ya consabida y rutinaria ‘unidad’ como se combate la creciente decepción de centenares de millones de europeos que tienen motivos más que sobrados para sentirse así: rumiantes de recuerdos de aquellos entusiasmos suyos de antaño.
Los medio votados dirigentes de la UE sentados en cómodas y seguras poltronas del poder prefieren no mirar para ver, esperar a que escampe, pensar que sigue habiendo cola a la puerta para entrar.
¡Necios!, se os ha ido la juventud y la modernidad por salvase la parte. Os sentasteis a la mesa del banquete ya el siglo pasado abrazaditos a vuestras amigas y amigos millonarios. Y ahí —en ese siglo— seguís. Os sentís muy confortables, en lugar de bajar a mancharos vuestras bendecidas manos hurgando en las raíces de los problemas de los ciudadanos. Problemas que no son otros que la génesis de una identidad europea renovada, cuajada de posibilidades de vida futura, con poderes cercanos a ellos y no en la chimbamba —Bruselas, eso ¿qué coño es?—, con un reparto no tan cruel y mendigante de la tarta: saben que la igualdad no es posible pero al odiar la rapiña de que son objeto y que vosotros alentáis, están empezando a odiaros.
Lo llamáis 'populismo': tomad nota. Antes de que sea demasiado tarde.
Amador, hablando se entiende la gente. Pero para hablar de la "res pública" se necesita abrir espacios públicos de libertad... En todos los sitios, es difícil encontrar estos espacios. En España es angustioso.
No lo sé, Paco, no me atrevo a evaluar todavía. Es pronto pero quizá los Círculos y asambleas de PODEMOS pudieran estar siendo un tipo de foro más moderno y renovado. Ya son más de cien mil afiliados en España.
Yo en lugar de ver los peligros de podemos pienso en aquellos grupos y asociaciones de vecinos que participaron en la transición; por eso les apoyo. La desgracia es que fuera el PSOE por un lado por su venderse al poder del dinero y el PC por otro por no ser capaz de asumir que IU nació como movimiento no tanto como partido.....los que en gran medida provocaron la sequía y la muerte de toda aquella vitalidad social. Mi miedo es que Podemos toque demasiado pronto el poder y se llene de ..."mangantes que con el tiempo acaban en magnates". Pero de momento no hay más remedio que apoyarles en sus denuncias, incluso en sus "purezas" mientras sean de palabra porque, de momento, solo acosan al poder, que no es poco. Es un comienzo necesario.
Los resultados del referéndum de Escocia son una excelente noticia para no retroceder en la construcción europea. Unidos podemos ser más solidarios y tener más fuerza para afrontar las dificultades. Europa más unida jamás será vencida por la ignominia.
ResponderEliminarDesde el comienzo de la construcción europea, nunca hemos estado tan mal. A cada uno nos toca hacer todo lo posible para que lo construido no se derrumbe...
EliminarEl resultado del voto escocés es un motivo de alegría... de esperanza en el poder de los ciudadanos..y en la fuerza de la solidaridad.
Esa es la Europa que necesitamos. La del S.XXI. No la de los nacionalismos del S.XIX, la de las fronteras cerradas y las miradas de rechazo al extranjero porque es diferente.
Esa Europa ya la conocemos demasiado bien, hemos sufrido sus consecuencias y no queremos que sea el futuro de nuestros hijos.
Qué pena de editorial el 'fervorín' de El País sobre este referéndum: cada día que pasa se aleja más y más de su línea ‘progresista’ que inició en el 75. Quiero pensar que no por intereses económicos. Quiero pero me fallan las fuerzas.
EliminarNo es con llamamientos voluntaristas, retóricos de esa ya consabida y rutinaria ‘unidad’ como se combate la creciente decepción de centenares de millones de europeos que tienen motivos más que sobrados para sentirse así: rumiantes de recuerdos de aquellos entusiasmos suyos de antaño.
Los medio votados dirigentes de la UE sentados en cómodas y seguras poltronas del poder prefieren no mirar para ver, esperar a que escampe, pensar que sigue habiendo cola a la puerta para entrar.
¡Necios!, se os ha ido la juventud y la modernidad por salvase la parte. Os sentasteis a la mesa del banquete ya el siglo pasado abrazaditos a vuestras amigas y amigos millonarios. Y ahí —en ese siglo— seguís. Os sentís muy confortables, en lugar de bajar a mancharos vuestras bendecidas manos hurgando en las raíces de los problemas de los ciudadanos. Problemas que no son otros que la génesis de una identidad europea renovada, cuajada de posibilidades de vida futura, con poderes cercanos a ellos y no en la chimbamba —Bruselas, eso ¿qué coño es?—, con un reparto no tan cruel y mendigante de la tarta: saben que la igualdad no es posible pero al odiar la rapiña de que son objeto y que vosotros alentáis, están empezando a odiaros.
Lo llamáis 'populismo': tomad nota. Antes de que sea demasiado tarde.
Me encanta, Ernesto, que respondas como europeo rompiendo fronteras. Que el encuentro sea en espacios cada vez más abiertos.
ResponderEliminarAmador, hablando se entiende la gente. Pero para hablar de la "res pública" se necesita abrir espacios públicos de libertad...
ResponderEliminarEn todos los sitios, es difícil encontrar estos espacios. En España es angustioso.
No lo sé, Paco, no me atrevo a evaluar todavía. Es pronto pero quizá los Círculos y asambleas de PODEMOS pudieran estar siendo un tipo de foro más moderno y renovado. Ya son más de cien mil afiliados en España.
EliminarHay que ver cómo evolucionan...pero están abriendo un espacio publico muy interesante...lleno de peligros también, como la vida misma...
EliminarYo en lugar de ver los peligros de podemos pienso en aquellos grupos y asociaciones de vecinos que participaron en la transición; por eso les apoyo.
ResponderEliminarLa desgracia es que fuera el PSOE por un lado por su venderse al poder del dinero y el PC por otro por no ser capaz de asumir que IU nació como movimiento no tanto como partido.....los que en gran medida provocaron la sequía y la muerte de toda aquella vitalidad social.
Mi miedo es que Podemos toque demasiado pronto el poder y se llene de ..."mangantes que con el tiempo acaban en magnates". Pero de momento no hay más remedio que apoyarles en sus denuncias, incluso en sus "purezas" mientras sean de palabra porque, de momento, solo acosan al poder, que no es poco. Es un comienzo necesario.