Se me ofreció, en su día, la licenciatura en Filosofía mediante unos trámites totalmente lights, que agradecí pero que no acepté. Eso sí, he sido "Catedrático consorte y sigo siendo Doctor consorte" en Filosofía y colaborador consorte de una inacabada tesis doctoral.
Tengo a gala un reconocimiento nacional, SIMO 82, por mi "valiosa contribución al desarrollo ofimático" en España. Sin embargo este otorgamiento está a años luz de los estudios académicos en Humanidades, Filosofía (título de Bachiller en Filosofía, no hice la licenciatura), Postgraduado en Ciencias Empresariales ICADE, también sin terminar, interrumpido para hacer el Servicio Militar y luego por necesidad del trabajo y familia. Pero reconozco haber aprovechado las oportunidades de la empresa Xerox (17 años) de la que fuí Systems National Manager, así como la atención a las nuevas tecnologías hasta el punto de granjearme autoridad en el conocimiento de los sistemas tanto en empresas como Telefónica (fui Director Proyecto Páginas Amarillas Electrónicas) como en la Universidad Politécnica UPM en el área de Sistemas Expertos. He introducido en España los primeros equipos de videoconferencia en RTB. Unas semanas antes de jubilarme en el foro de la CEOE daba una conferencia sobre la oportunidad de los huertos solares fotovoltáicos a propósito de las energías renovables. Todo esto y muchas cosas más han sido el quehacer de mi vida profesional, todo ajeno a la formación académica y por supuesto a los correspondientes títulos.
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