Hace unos días, Paco, con menor argumentación lógica que PR, en una charla con amigos, comentando la situación en la que nos encontramos en España, dejé encima de la mesa mi sospecha de que estábamos al borde de la tercera república. Más curioso; aludí, porque lo leí con pasión, al libro "Sonámbulos"; la imagen, o la metáfora, me valía como apoyo para presumir una salida a la situación no querida ni buscada por nadie, como en 1914; para reforzar el argumento -presuntuoso, creía yo- di el dato de la visita del Káiser a su primo en Londres unos seis días, creo recordar, de que comenzasen los tiros. El atentado de sarajevo, que siempre se ha dado como causa de la guerra tuvo lugar el 28 de junio, y las hostilidades el 6 de agosto; algo más de un mes. Nosotros llevamos jugando con fuego -es decir, armando argumentos y desencuentros- desde hace unos años; cuando menos desde el 21 de diciembre de 2015. Veremos. El final de la segunda restauración es, según Pérez Royo, una de las salidas. El libro de Clark concluye con esta frase: "En este sentido, los protagonistas de 1914 eran como sonámbulos, vigilantes pero ciegos, angustiados por los sueños, pero inconscientes ante la realidad del horror qye estaban a punto de traer al mundo".
Para seguir con el tema. Otro libro sobre 1914, que leí a la vez que el de Clarck, concluye: "Y si quisiéramos señalar culpas desde nuestra perspectiva del siglo XXI, podríamos acusar de dos cosas a quienes llevaron a Europa a la guerra. Primero, de falta de imaginación para ver cuán destructivo sería un conflicto semejante; y segundo, de falta de valor para enfrentarse a quienes decían que no quedaba otra opción que ir a la guerra. Siempre hay otras opciones". (MacMillan, Margaret, "1914. De la paz a la guerra", Turner Publicaciones, Noema, madrid 2ª edición, 2014).
Estoy de acuerdo, Eduardo. El articulo de JPR me parece esclarecedor desde un punto de vista jurídico y político. Explicar cómo se ha llegado a esta lamentable situación es más complejo. Pero el resultado es evidente. Especialmente evidente, después de la última reunión del comité federal del psoe. Cada vez quedan menos dudas sobre la capacidad del sistema político del 78 para dar respuestas a los problemas de la sociedad, si no se produce una reforma en profundidad de la constitución. Todos los movimientos que los ciudadanos estamos presenciando durante estos largos meses, me parecen un intento desesperado para no cambiar nada en profundidad. La III República, si llega, llegará por el hundimiento del Régimen del 78, por su incapacidad de regeneración, por su escandalosa corrupción y por el descrédito de sus principales protagonistas. Nadie cambia un sistema que funciona y nadie puede saber si el nuevo sistema, en este caso la III República, funcionará y será capaz de responder a los problemas de los ciudadanos. Pero el vacío en política no existe y no parece que se pueda vivir indefinidamente en la resignación y sin esperanzas. Arrieros somos, Eduardo, y en el camino nos encontraremos!!
Hace unos días, Paco, con menor argumentación lógica que PR, en una charla con amigos, comentando la situación en la que nos encontramos en España, dejé encima de la mesa mi sospecha de que estábamos al borde de la tercera república. Más curioso; aludí, porque lo leí con pasión, al libro "Sonámbulos"; la imagen, o la metáfora, me valía como apoyo para presumir una salida a la situación no querida ni buscada por nadie, como en 1914; para reforzar el argumento -presuntuoso, creía yo- di el dato de la visita del Káiser a su primo en Londres unos seis días, creo recordar, de que comenzasen los tiros. El atentado de sarajevo, que siempre se ha dado como causa de la guerra tuvo lugar el 28 de junio, y las hostilidades el 6 de agosto; algo más de un mes. Nosotros llevamos jugando con fuego -es decir, armando argumentos y desencuentros- desde hace unos años; cuando menos desde el 21 de diciembre de 2015. Veremos. El final de la segunda restauración es, según Pérez Royo, una de las salidas. El libro de Clark concluye con esta frase: "En este sentido, los protagonistas de 1914 eran como sonámbulos, vigilantes pero ciegos, angustiados por los sueños, pero inconscientes ante la realidad del horror qye estaban a punto de traer al mundo".
ResponderEliminarPara seguir con el tema. Otro libro sobre 1914, que leí a la vez que el de Clarck, concluye: "Y si quisiéramos señalar culpas desde nuestra perspectiva del siglo XXI, podríamos acusar de dos cosas a quienes llevaron a Europa a la guerra. Primero, de falta de imaginación para ver cuán destructivo sería un conflicto semejante; y segundo, de falta de valor para enfrentarse a quienes decían que no quedaba otra opción que ir a la guerra. Siempre hay otras opciones". (MacMillan, Margaret, "1914. De la paz a la guerra", Turner Publicaciones, Noema, madrid 2ª edición, 2014).
ResponderEliminarEstoy de acuerdo, Eduardo.
EliminarEl articulo de JPR me parece esclarecedor desde un punto de vista jurídico y político.
Explicar cómo se ha llegado a esta lamentable situación es más complejo. Pero el resultado es evidente. Especialmente evidente, después de la última reunión del comité federal del psoe.
Cada vez quedan menos dudas sobre la capacidad del sistema político del 78 para dar respuestas a los problemas de la sociedad, si no se produce una reforma en profundidad de la constitución.
Todos los movimientos que los ciudadanos estamos presenciando durante estos largos meses, me parecen un intento desesperado para no cambiar nada en profundidad. La III República, si llega, llegará por el hundimiento del Régimen del 78, por su incapacidad de regeneración, por su escandalosa corrupción y por el descrédito de sus principales protagonistas.
Nadie cambia un sistema que funciona y nadie puede saber si el nuevo sistema, en este caso la III República, funcionará y será capaz de responder a los problemas de los ciudadanos. Pero el vacío en política no existe y no parece que se pueda vivir indefinidamente en la resignación y sin esperanzas.
Arrieros somos, Eduardo, y en el camino nos encontraremos!!