Catecismo retocado y mejorado del
Padre Rouco
1ª edición, 2014 ©
Editorial O Diábolo
C/Virgen de la Monjía, 13 -28027 Madrid
Cap. IV
DE LAS VIRTUDES TEOLOGALES
1 Pregunta: Decidme, niño, cómo os llamáis.
Respuesta: Isabelita. Y antes, Miguelito, Padre.
2 P. ¿Cómo es eso posible?
R. Por la gracia de Dios, que me hizo así.
3 P. ¿Sois cristiano? ... quiero decir, ¿sois cristiana?
R. Sí, pues estoy bautizada.
4 P. ¿Cuántas son las virtudes teologales?
R. Tres son ellas, Padre.
5 P. ¿Cuáles son?
R. Las tres virtudes teologales son dos: la caridad.
6 P. Decidme, niño -perdón, niña-, ¿qué entendéis por caridad?
R. Justicia y amor, como dijo Cristo Nuestro Señor.
7 P. ¿Por ventura la solidaridad desdeñáis?
R. No, pues sirve para templar gaitas, como dijo Cristo Nuestro Señor.
8 P. ¿Qué es el amor entonces?
R. Querer antes la felicidad de los demás que la propia.
9 P. Y de la justicia, ¿qué pensáis?
R. Que la letra con sangre entra, Padre.
10 P. ¿También eso lo dijo ... Cristo Nuestro Señor?
R. Eso no lo dijo sino que lo hizo.
11 P. ¿No condenáis toda violencia?
R. Solo la mala, Padre.
12 P. ¿Qué entendéis por violencia mala?
R. Aquella que por ser gratuita carece de fin bueno alguno.
13 P. Decidme, niño -o niña, o lo que coño seáis ... -, ¡¿existe acaso una violencia buena?!
R. Sí, Padre: la física y la psicológica ejercida contra cosas, situaciones o personas que a la ciudadanía machacan.
14 P. Mira, bonita ... ¡por aquí, dijo eso ... Cristo Nuestro Señor !
R. No, Padre, eso lo decían los principales teólogos del XV, XVI y XVII.
Nihil obstat
Desde luego te las traes....Te damos un doscientos por cién. Vas de mejor en mejor.
ResponderEliminarPIEDAD Molina