Caso 'Matojos en JUBJUB', resuelto !

Ummm, me dije … 

(Hércules Poirot pide disculpas desde aquí a Mike Hide Caden, conocido entre sus amigos por Cheroqui. Y no Hyde. Tampoco lo de su trabajo como especialista en espionaje de cifrados, que resultó que no. Las investigaciones es lo que tienen, que se patina un poco. Pero ‘Hide’ ... significa ‘ocultar’. Ummm, me dije …)

El Caso Matojos en JUBJUB está resuelto. Después de entrevistarme con Mike en la Cafetería Maestro Churrero, de Madrid, me crucé al salir con una más que vistosa joven a la que vi enseguida saludar con efusión a Mike, sentándose a charlar con él acto seguido. Al parecer había quedado con ella allí mismo para cuando terminara de hablar conmigo. Ummm …, me dije: espera en la calle y síguela ! 

Ahorraré tediosos detalles de la trama yendo a lo esencial. La vistosa joven resultó ser Guinevere Johansson (Ginebra la de Juan, en vuestro bellísimo idioma capaz de crear expresiones tan sonoras como ‘leches en vinagre’ y que yo no acierto a comprender bien). Me enteré en un vuelo low cost Madrid-Genève. No  era casualidad –je, je, je …- que nuestros asientos estuvieran contiguos ni que yo me mostrara muy, pero que muy simpático y comunicativo con ella. Así supe que:

- Trabajaba en el staff del socialdemócrata Ed Miliband, en Londres (!). En el Council of the Labour Party for the EU para ser exactos.

- Muy aficionada a la cultura hispana: con frecuencia hacía viajes Londres-Madrid-Londres.

- Ahora se dirigía a Chamonix, en la Alta Saboya, para esquiar unos días junto a ciertas amistades que había formalizado mientras cursaba unos para mí enigmáticos estudios en la Facultad de Arlequinato de la UÉ (sic!), en Antwerpen (BÉLGICA).

- Item más: una compañera italiana de esos estudios le había presentado en Madrid a uno de la pandilla, un canadiense del que estaba enamorada (tonta, la chica no era, desde luego!).

- Supe también por último -puede que incluso más importante aún- que ella y sus amistades eran muy apasionadas de la situación por la que estaba atravesando la Unión Europea y que participaban en muchas actividades. Entre ellas, en cierto Blog del que habían conseguido la clave de seguridad del administrador. Ummm, me dije ... ¿final del caso?.

Ahorraré tediosos detalles de la trama yendo a lo esencial, pues a partir de aquí todo empieza a encajar con la valiosa ayuda -pagada con esplendidez, eso sí- de cierta camarera del Hotel-Pub Le Petit Prince de dicha localidad de Chamonix. Relación de integrantes del grupo de esquí:

Michael Opa-tisha Wocka-locka,

Heikki Virtanen, 

Emma Melle,

Carmen García Villaescusa

y, obviamente, Guinevere Johansson

¿Les suenan a ustedes estos nombres?

Ahorraré tediosos detalles de la trama yendo a lo esencial.

Husmeando a lo largo y ancho de vuestro Blog JUBJUB di con la llave última que cierra este caso: en marzo del pasado año hay una Entrada que de forma explícita relaciona a quien ustedes conocen como indio Cheroqui con uno de los contribuyentes que figuran en la lista de ellos y del que es muy amigo.

Por otra parte, Cheroqui desde mucho antes había conocido a Guinevere en un cóctel de la legación canadiense: se la presenta una periodista gráfica italiana -la ya citada Emma Melle- que realiza reportajes gráficos para la embajada.

¿Cómo supo la clave secreta Cheroqui? Muy fácil, espiando a dicho contribuyente cuando se juntaban a veces y él le insistía tanto en ver vuestro Blog en su iPad.

Cheroqui no acabó de decidirse a utilizarla él mismo (como seudónimo, claro), hasta abril del 2012, pero ya desde septiembre de 2011 empiezan a utilizarla los amigos de Guinevere, y que enseguida lo fueron de él también. Le enseñaría a Guinevere y sus amigos el Blog de su amigo, les parecería interesante -a mí, HP, me fascina!-, reirían, les diría que él conocía la clave, je je je... Se la pedirían ... se la daría y comenzarían a escribir en él. Por broma quizá, por juego o por ganas de decir cosas. Lo ignoro: Hércules Poirot no lo sabe y lo confiesa.

Como sigue sin saber quién inserta Entradas bajo el logo de Arlequín Salmón. Cualquiera de los citados, o quizá ... No, no, la verdad es que eso no lo sé con total certeza. Tengo una sospecha pero prefiero ... no ... no.

Lo que sí sé es que no hay traidor/es. ¿Un descuido de dicho contribuyente al teclearla a la vista del indio?, seguramente. Pero pueden dormir tranquilos. Todo pasa por buenas manos.

Eso sí, la vistosa joven Guinevere Johansson -o Ginebra, si ustedes lo prefieren- me confesó ciertas intenciones que no pienso revelar. Ummm, ... me digo: eso no entra en el precio.

Ah, y FELIZ AÑO 2013 !